Observa esta imagen detenidamente por unos segundos.
Ahora imagina que este es nuestro cerebro y que cada pensamiento, ideas , recuerdos, son semillas en nuestra cabeza. Estas crecen , quizá a veces desproporcionadas si las regamos demasiado, lo cual nos lleva a reflexionar que deberíamos de poner mas atención a lo que pensamos. Notar con cuanta frecuencia traemos un pensamiento a nuestra mente , si lo hacemos probablemente descubriremos que estemos regando las semillas equivocadas ( miedos, inseguridades, dudas, vacíos, ) todos los días.
Si somos mas conscientes de ellos quizá podríamos recobrar el control de nuestros pensamientos y emociones al recordar que somos nosotros los que decidimos que semilla plantar y regar. No dejemos que sean las semillas las que decidan y se instalen en nosotros al azar, no olvidemos que nosotros dominamos a nuestro cerebro y no al revés, no dejemos que nuestro cerebro nos controle a nosotros, recordemos que estamos al volante de nuestra vida y pensamientos…